No se puede resumir mejor el concepto del nuevo entorno de
trabajo que Google pretende crear en sus oficinas, y así lo define Gary Hamel
en su libro “El nuevo Management”, el concepto, se aleja infinitamente de la antigua
selección de personal que se hacía en muchas Organizaciones en la que no
querían a “ninguna oveja fuera del camino”, y ni por asomo se contrataba a
ningún empleado con mayor potencial que un jefe, ¿Acaso era eso una ofensa?
Efectivamente eran tiempos en los que tener a alguien con talento
en el equipo podía convertirse en un problema capaz de originar algún desajuste
en la jerarquía vertical de la organización.
Cuando pensamos en un equipo de trabajo mediocre, que
destaca por su poca creatividad, autonomía y ambición lo más probable es que
éste se vea amenazado por cualquier persona con talento que se integre en el
mismo y acabe por anular a dicha persona.
Por eso, Google rehúye completamente de este tipo de
perfiles y pone bien alto su Cartel: “Zona libre de Idiotas”.
Google sabe que su mayor
potencial son los trabajadores, promueve y premia la innovación y por ello
necesita a gente de primera que destaquen por altos niveles de creatividad y sean
capaz de iniciar nuevos proyectos que a la vez den de sí nuevos productos.
Google asume que de
todos esos proyectos, la gran mayoría fracasarán pero es consciente que tan
solo consiguiendo el éxito de un 10% de estos, la empresa seguirá creciendo a
grandes volúmenes.
La evolución hacia el modelo de selección por competencias y
a día de hoy hacía la selección por potencial va dirigida hacia una “zona libre
de idiotas” (alejada de la mediocridad y
el miedo por la innovación) apoyada por
managers que asumen que el empleado que entra hoy en la empresa debe de estar
capacitado para aportar cosas que aún no han ocurrido en la misma.
Se acabó el contratar a personas que trabajen únicamente
para el qué, es preciso que contemos con personas que nos hagan plantearnos
cómo hacemos las cosas aportándonos quizás soluciones que nunca habíamos
imaginado.
Muchas gracias por visitar el blog.
Saludos.
Javier García Rubio